Utensilios

La frecuencia depende de tus hábitos y del estado de tus uñas. En general, se recomienda realizar una manicura cada semana o cada dos semanas para mantener tus uñas saludables y presentables.

Es esencial limpiar tus utensilios después de cada uso. Puedes utilizar agua tibia con jabón, asegurándote de eliminar cualquier resto de producto. De vez en cuando, es bueno desinfectar con alcohol para una higiene extra.

Es mejor no compartir tus utensilios. Cada persona tiene diferentes tipos de piel y uñas. Compartir utensilios puede aumentar el riesgo de infecciones o bichos no deseados.

Si tienes uñas sensibles o dañadas, utiliza utensilios que sean suaves y evita presionar demasiado en las zonas delicadas. Además, te recomiendo consultar con un especialista si la situación persiste.

Utiliza el cortauñas en un ángulo de 45 grados. No cortes las uñas demasiado cortas ni los bordes en forma curva, ya que esto puede causar problemas como las uñas encarnadas.

Los utensilios eléctricos son seguros si se utilizan de manera adecuada. Léete el manual y sigue las instrucciones. Si sientes alguna molestia, es mejor detenerse y consultar a un experto.

Sí, muchos utensilios de manicura son aptos para uñas artificiales. Sin embargo, asegúrate de que el utensilio sea adecuado para el tipo de material de la uña artificial que estés utilizando.

Guarda tus utensilios en un lugar seco y limpio. Una billetera o un estuche específico es ideal para evitar que se ensucien y se dañen.

No es estrictamente necesario, pero es una buena práctica, especialmente si tienes piel sensible o si estás utilizando productos químicos que pueden irritarte la piel.

Además de los utensilios, es recomendable tener en cuenta cremas hidratantes, aceites para cutículas y esmaltes de uñas. Estos complementos potenciarán el cuidado y la presentación de tus uñas.